Promocionar, promocionar,...promocionarme como si se fuese a acabar el mundo. jejejje
Abro dos direcciones para mi obra: una para el plein air y otra para la pintura del alma, la personal...muy personal. Pero manteniendo el pseudónimo en ámbas: Sémele.
Esto del pseudónimo me gusta, como todos los pseudónimos al principio lo creé para esconder, pero ahora ya cumple una función diferente. Sémele tiene voz propia y me gusta.