Dioniso, el niño dios, pasó su infancia en la región de Nisa al cuidado de las ninfas. las musas, las ménades, los sátiros y los silenos también contribuyeron a la educación de Dioniso. con una corona de hiedra sobre sus sienes, el joven corría por montes y bosques en compañia de las ninfas, y las montañas le devolvían los ecos de sus risas y gritos.
La crianza de Baco (1632), por Nicolas Poussin.